Este domingo disfrutamos una refrescante conferencia impartida por la Sra. Sylvia Silva, quien nos compartió acerca de la fe y cómo cultivarla y hacerla crecer.
Como sabemos, la fe es la forma en la que nos relacionamos con Dios, de ahí la importancia de conocer cada vez más acerca ella.
Tenemos algunas ideas erróneas acerca de la fe, por lo que es importante ir siempre a la palabra de Dios y desechar todo lo que no esté de acuerdo a ella.
La Sra. Silva nos resumió en cinco puntos básicos, la forma en que podemos crecer en nuestra fe.
1.- Cada creyente recibió ya una medida de fe:
Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Romanos 12.3.
2.- Esta medida de fe puede ser aumentada por medio de la palabra de Dios sembrada en el corazón.
Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.Romanos 10.17.
3.- Jesús es la Palabra (El Verbo).
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios.Juan 1.1-2.
4.- La fe va de la mano de la paciencia para heredar las promesas de Dios.
A fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas.13 Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo,14 diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente. 15 Y habiendo esperado con paciencia, alcanzó la promesa.Hebreos 6.12-15.
5.- El creer, decretar, obedecer y perseverar firmes en la fe y en la revelación traerá resultados a nuestra vida.
Recuerda que para crecer en tu fe y recibir las promesas de Dios necesitas:
-Escuchar la voz de Dios y recibir una palabra directamente de Él, una palabra rhema, que es la palabra exacta para tu necesidad en el momento preciso.
– Creer con el corazón lo que Dios te está hablando.
-Confiésalo con tu boca…¡decrétalo!
– Actúa conforme a aquello que Dios te ha dicho.