Este domingo nuestro Pastor Gabriel Acero, nos compartió una poderosa revelación sobre cómo ganar nuestras batallas, ejemplificándolo con la historia de la viuda que encontramos en el libro de Lucas 18:1-8 quien, yendo ante un juez terrenal e injusto, muy sabiamente esta mujer decidió no buscar confrontación con su adversario, sino que fue a presentar su caso ante la instancia correcta, para que de acuerdo a lo legal se le hiciera justicia, y así fue.
Cuando hay un Juez (Dios), por ende, hay un juicio, y si Jesús es un mediador, es porque también actúa como abogado defensor, por lo que, si deseas vencer a tu adversario, sólo podrás hacerlo llevándolo a juicio y por medio de la Sangre del Cordero que habla a tu favor (Hebreos 12:24), así que ¿no es momento que comiences a llevar tus casos ante la Corte Celestial?