Romanos 8:37-39 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. 38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
AMADO PADRE: Hoy iniciamos esta jornada de 21 días de ayuno y oración. Pedimos que tu presencia y tu voz nos dirijan cada día. ¡Te damos gracias porque en Cristo Jesús, ya tenemos la victoria, somos más que vencedores!
Al comenzar, queremos darte toda la honra, la gloria, la alabanza y la adoración. ¡Tú eres el único digno de recibirla! Permítenos comprender qué en ti tenemos todo lo necesario para conquistar cada área de nuestra vida personal y como iglesia. ¡Te exaltamos, te bendecimos, santificamos y magnificamos tu Nombre! ¡Señor Jesucristo eres el vencedor de vencedores, venciste al pecado, al mundo, al diablo y a la muerte! Todos tus enemigos se postran, porque los conquistaste a cada uno; y al estar en ti, tenemos tu victoria.
SEÑOR JESÚS: Qué la revelación de tu conquista se arraigue en nuestra mente y corazón, para ejercer la autoridad que nos has delegado y establecer en tu Nombre, tu reino y tu voluntad. Declaramos qué a lo largo de estos 21 días de ayuno y oración, avanzamos a tomar la herencia preparada en lo individual y como Centro de Vida Lomas.
PADRE: Nos acercamos y sometemos a ti, resistimos al diablo, quién huirá de nosotros. Stg. 4.7. Declaramos que el enemigo suelta las almas que mantuvo cautivas, para que les resplandezca la luz de tu evangelio. Declaramos abundante salvación en Cristo, en todo el territorio asignado a Centro de Vida Lomas. ¡Te creemos, y te amamos obedeciendo tu Palabra!
Abre nuestro ojos y oídos espirituales a tu Palabra y a la voz de tu Espíritu Santo; guíanos, ve delante de nosotros, dirígenos. Concédenos el arrepentimiento y la sabiduría que necesitamos cada día, para exaltarte y glorificarte con nuestra vida. En Cristo Jesús, amén.
Salmos 107:7-8 Los dirigió por camino derecho, para que viniesen a ciudad habitable. 8 Alaben la misericordia de Jehová, y sus maravillas para con los hijos de los hombres.