Isaías 44:3-4 Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos; 4 y brotarán entre hierba, como sauces junto a las riberas de las aguas.
PADRE: Tú reinas sobre todo, derrama tu gloria a tu pueblo México, muéstranos tu amor, tu salvación y poder. ¡Ven a vivificar a este pueblo dormido y oprimido! Oh Dios resucítanos, que tu rostro brille sobre nosotros y que la salvación en Cristo Jesús sea revelada a miles con señales, prodigios y milagros.
PADRE: Derrama agua para calmar la sed del corazón y riega los campos espirituales secos; derrama de tu Espíritu sobre tu iglesia y sobre cada mexicano; para que corran a ti familias y pueblos enteros, iluminados con tu amor y con la salvación de Jesucristo.
Hechos 2:17-18 Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y sus hijos y su hijas profetizarán; sus jóvenes verán visiones, y sus ancianos soñarán sueños; 18 Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán. Joel 2:28-29. Jn. 3.16-17.
ESPÍRITU SANTO: Cae sobre tu iglesia otra vez como lo hiciste en Pentecostés. ¡Necesitamos un avivamiento, una visitación del cielo! Comienza conmigo, atráeme a ti, a tiempos de búsqueda de tu presencia, de oración y clamor intensos; lléname de tu fuego. Hazme una antorcha encendida para que salga a proclamar a las ciudades y a los pueblos, cuanto amas a los mexicanos, y que Cristo murió por sus pecados para darles vida eterna. Sal. 65.4.
PADRE: Es tu gozo que seamos salvos, vivifica a los muertos espirituales, que nazcan de nuevo y reciban la justificación de vida que nos otorgas por la fe en Cristo Jesús. 1 Pe. 1.23-25. Lc. 15.7.
SEÑOR JESÚS: Que al predicar tu evangelio, el Espíritu Santo caiga sobre los que nos escuchen, cómo cayó en Pentecostés sobre tus primeros discípulos. Tu quieres que todos sean salvos, y otorgas el don a todos los que creen en el Señor Jesucristo y reciben el privilegio de arrepentirse de sus pecados para ser limpiados con la Sangre del Cordero. Ap. 2.4-5, 3.19-20.
PADRE: Prepara un pueblo lleno del Espíritu Santo y de fe, para ser instrumentos de tu manifestación sobrenatural; que ocurran milagros, sanidades, liberaciones y transformaciones en los nuevos creyentes. ¡En Cristo Jesús, amén! 2 Cor. 3.6.
Habacuc 3:2-3 Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer; en la ira acuérdate de la misericordia. 3 Dios vendrá de Temán, y el Santo desde el monte de Parán. Su gloria cubrió los cielos, y la tierra (mexicana) se llenó de su alabanza.
Isaías 32:15-18 hasta que sobre nosotros sea derramado el Espíritu de lo alto, y el desierto se convierta en campo fértil, y el campo fértil sea estimado por bosque. 16 Y habitará el juicio en el desierto, y en el campo fértil morará la justicia. 17 Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre. 18 Y mi pueblo habitará en morada de paz, en habitaciones seguras, y en recreos de reposo. Hch. 11.15-18.
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