El Padre dice hoy, las canciones en la noche traerán gozo por la mañana. No permitas que el enemigo de tu alma te robe la canción de tu corazón. La canción del Espíritu no es un canto fúnebre. Yo no soy un Dios de luto. Yo soy un Dios de regocijo. El gozo no es un subproducto de mi reino, es mi reino. Mi reino en tu vida es la justicia, la paz y el gozo. Nadie puede robar tu gozo. Tu gozo no es algo efímero o fugaz. Tu gozo no puede ser robado, pero puedes optar por salir del gozo mirando y respondiendo a lo que está sucediendo a tu alrededor. Niégate a permitir que eso ocurra.
Nada puede separarte de mi gozo, dice el Padre. Mi gozo es tu porción. Mi gozo es tu aliado y recurso en el momento de la prueba. Ven a mí, y espera que sucedan cosas buenas. Tú no estás siendo ingenuo al creer que el cielo no se está cayendo y el reino está llegando. Las naciones de la tierra discuten y hacen sonar sus saberes haciendo todo lo posible para que llegues a pensar como ellos, ver como ellos y actuar como ellos. No cedas a la insistencia del hombre o de la estridencia de sus alarmistas puntos de vista. Aunque toda la tierra detone en un momento catastrófico en una orgía de violencia – ésta no se acercará a ti. Yo te tengo en el lugar secreto. Vas a salir ileso de cualquier lugar donde el hombre te ha puesto para robarte, porque Yo te he puesto y establecido en mi bendición para tu vida.
-Russel Walden