El Padre dice hoy: Yo soy el que te librará de todas tus angustias y de toda la destrucción. Yo soy el que libra tus batallas y te pone en alto. Yo soy el que perdona y redime y sana y libera. Cuando clames a mi, Yo te responderé. Con mi bendición Yo te he bendecido. No te olvides de todos mis beneficios, porque te saciaré con cosas buenas. Ninguna palabra de mis buenas promesas fallará, dice el Señor.
Entonces, mira hacia arriba, tu redención está cerca de ti. Tu liberación está cerca. Hoy es el día de la salvación y la sanidad. Yo no retengo mi bondad y bendición en tu vida. Descansa y calma tu alma en mi pecho y deja que mi presencia sea tu alegría y tu paz. Yo te estoy fortaleciendo con mi diestra justa y te sostengo y renuevo mi poder dentro de ti. Hay una satisfacción profundamente refrescante del alma que se encuentra cuando te lavas y te renuevas en el agua de mi palabra, porque en verdad Yo estoy velando por cumplirla, dice el Padre.