El Padre dice hoy, la fe se trata de riesgos. Si no estás tomando riesgos; si no estás saliendo adelante, la fe está inactiva e inerte. La fe corre riesgos. Propónte en tu día que vas a ser un tomador de riesgos en mi reino. Que enfrentarás tus miedos, enfrentarás tus defectos y desafiarás las circunstancias y situaciones que te desafían. Las montañas se moverán. Los valles se convertirán en una llanura, y tú saldrás al camino del impulso hacia adelante en mi reino donde el caminante, aunque sea un tonto, no se equivoca ni se pierde en él. Créeme. Confía en el don de la fe creyendo que Yo la he puesto en tu interior.
El abatimiento se convertirá en deleite. La pesadez desaparecerá y tu espíritu tomará alas y hará lo imposible. ¿Estás listo, dice Dios? Dentro de ti yace el poder creativo de mi mano que hizo girar las galaxias a la existencia e hizo que los planetas se inclinaran ante mi voluntad en un momento de tiempo. Hay naciones en ti. Hay hazañas por hacer y aventuras por delante que se desarrollarán y crearán en ti y para ti un futuro más allá de tu imaginación.
Tú puedes porque estás en mí y Yo estoy en ti. Yo estoy trabajando. Créeme. Confía en mí con tu corazón. No te decepcionarás. No te escandalizarás ni fracasarás. Mi amor esta en ti. Es quien Yo soy en tí y quien tú eres en mí. Mi amor nunca deja de crear, tener éxito, abrazar y ser correspondido. Acepta mi palabra de promesa y mi poder para cumplir. Yo estoy contigo. No estás solo, nunca. Las cosas que has creído y buscado no son una ilusión; son tu futuro que se desarrolla justo por delante para satisfacer el clamor de tu corazón. RW