Con el deseo de exaltar tu nombre y adorarte nos acercamos a ti. Tú eres el único Digno, Santo, Todopoderoso, nuestro Sanador, nuestro Padre Eterno. Unidos como un cuerpo, como un ejército, como una familia, nos ponemos de acuerdo con tu Palabra, con tu voluntad. Oramos desde la obra terminada de la cruz, cuando dijiste Consumado es. Oramos desde la victoria, desde la obra consumada de la cruz. No oramos desde la necesidad sino desde la respuesta. Desde la victoria ganada en Cristo. Desde los lugares celestiales donde estamos sentados juntamente con Cristo oramos.
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