El Padre dice hoy, ve en primera clase hasta el final. Yo no soy un Dios de medias tintas. Mi presencia permanente en tu vida significa que las cosas están mejorando cada vez más en todos los sentidos, con el tiempo. Yo soy un Dios de plenitud y soy un Dios de lo completo. Yo te estoy completando, y estoy llenando cada déficit y cada lugar vacío en tu corazón y en tu vida interior y exteriormente. Nunca te permitas verme como alguien que hace otra cosa mas que bendecirte mientras permaneces en un lugar de cooperación conmigo en todas las cosas. En última instancia, a medida que pongas tu confianza en mí y cedes tus deseos y necesidades al fuego templado de mi proceso de refinamiento, verás que los deseos más elevados de tu corazón se hacen realidad muchas veces en un momento de tiempo.
Propón en tu corazón tener una mente interior de Dios y ser consciente de Cristo en todo momento. Conoce que “como en el cielo, así en la tierra” es tu porción. No hay pobreza en el cielo, entonces, ¿por qué aceptarías o abrazarías la pobreza en la tierra? No hay escasez ni angustia en el cielo, entonces, ¿por qué esperarías algo más que bendiciones en la tierra? La enfermedad y la dolencia no existen en los cielos; decide que estas cosas no pertenecen a tu vida, porque el precio de tu libertad, tu salud y libertad se pagaron con la sangre preciosa. Abraza, acepta y conoce que ésta es tu porción, y no serás excluido de mi promesa de ninguna manera. Comprende esto y comprenderás y tendrás una idea de cuánto te amo y hasta qué profundidad Yo estoy moviendo el cielo y la tierra para llevar mi propósito más elevado a ti y a tu alrededor en este día. RW