De acuerdo con el diccionario, orgullo es la actitud de satisfacción personal en virtud de nuestras capacidades, méritos propios y reconocimientos. Sinónimo de orgullo es la soberbia, la arrogancia, la vanidad, el exceso de estimación propia que lleva a la persona a sentirse superior a los demás, y por supuesto autosuficiente. Es también un apetito desordenado por ser preferido por encima de otros. La persona orgullosa se enaltece a sí misma al contemplar sus propias cualidades, con menosprecio hacia los demás. Sinónimos: Altivo, altanero.
Proverbios 21. 4.
Altivez de ojos, y orgullo de corazón, y pensamiento de impíos, son pecado.
El Señor Jesús, hablando a la gente, les daba ejemplos claros de humildad, como el no buscar el reconocimiento y la vanagloria de los hombres al orar o dar limosna; no pelearse por los mejores lugares en los eventos sociales, sino dar a Dios la gloria en todo.
Mateo 23. 5-7.
Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos; 6 y aman los primeros asientos en las cenas, y las primeras sillas en las sinagogas, 7 y las salutaciones en las plazas, y que los hombres los llamen: Rabí, Rabí.
Padre, hoy dejo de mirarme a mí mism@, a mis capacidades, supuestos logros y reconocimientos y levanto mi mirada a Jesús, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Pongo mis ojos en el autor y consumador de la fe, porque la fe es un cambio de mirada, dejo de mirar mis méritos, de tratar de purificarme a mi mismo y volteo mi mirada al Único que puede hacerlo, al que es perfecto. Mientras mire a Jesús, se realizarán en mí, todas las cosas que desee por tanto tiempo. Tú estarás dentro de mi, obrando el querer y el hacer por tu buena voluntad. Te ruego que me purifiques con tu preciosa sangre, para poder mirarte sin velo alguno todos los días de mi vida. Solo así podré contemplar tu esplendor el día que aparezcas para ser glorificado con tus santos y admirado por todos los que te estamos esperando. Enséñame a mantener mis ojos puestos en ti, en vez de en mí mism@, en el nombre de Jesús, amén.