El Padre dice hoy, Yo te he dado dominio sobre TU tierra. Tu vida representa la jurisdicción sobre la que Yo te he dado poder para bendecir y ser bendecido. Abre bien tu boca, y Yo la llenaré. Busca mi mesa de bendición y verás que YA ha sido preparada para ti. No te concentres en lo negativo, porque tú estás donde tu atención te lleve. Cualquier cosa que sea pura, perfecta, de buen nombre, PIENSA EN ESTAS COSAS, porque esa es tu porción de mi mano.
Yo no soy un Dios lejano de ti hoy. No estoy lejos, ni soy ajeno a tu lucha. Yo estoy tan cerca de ti como las manos y los pies. Yo estoy presente en el aliento de tu boca. Exhala mi favor e inhala mi bendición. Di de tu alma: “Tú eres el bendito…” Niégate a entrar en el estrés y la tensión de los conceptos religiosos de creencia. Pon tu atención en mi fidelidad y reconoce mi defensa en cada área de la vida. Es hora de que cobres el cheque en blanco de mi fidelidad, dice el Padre, porque mi favor hacia ti, no tiene límites. RW