¿Que tanto aceptas el gobierno de Dios y de
las autoridades “legítimas” que tienes hoy en tu vida?: Padre y madre biológicos. Al crecer descubrimos figuras de autoridad adicionales como: abuelos, maestros, entrenadores deportivos, pastor de tu iglesia, médicos. Más adelante jefes en el trabajo, esposo, gobierno civil, etc. Recordemos: ¡No existe un solo ser humano que no esté bajo algún gobierno legítimo al que tiene que dar cuentas!
¿Qué tanto sigues bajo la autoridad del diablo, a través de pecados y actitudes opuestas al amor y al perdón que el Señor nos otorga? La autoridad espiritual falsa, la del diablo, “no es legítima”. El diablo la ejerce a través de la ignorancia, la manipulación, el control, la seducción, las adicciones, la intimidación, la lujuria, la codicia, lo que le permitimos.
La brujería es un ejemplo de autoridad espiritual falsa. Busca por medios ilícitos controlar la vida del prójimo con sus hechizos. Renuciemos a sus engaños y no participemos más de ninguna práctica de adivinación e idolatría. ¡Hay muchas ofertas hoy día… ten cuidado!
Renuncia a toda autoridad del diablo sobre nuestra vida, en cuerpo, alma, espíritu, corazón. Renunciemos el espíritu de machismo y matriarcado heredado o adquirido. Los abusos de autoridad requieren apoyo espiritual, consejo y toma de decisiones conforme a la Palabra, para salir de la opresión y de la esclavitud que Cristo detesta. ¡Aprendamos más sobre la autoridad espiritual bíblica, para cambiar nuestra forma de gobernar y de ser gobernados!
Salmos 19.12-13. ¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos. 13 Preserva también a tu siervo de las soberbias; Que no se enseñoreen de mí; Entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión.
Padre, hoy recibo la bendición de todos los que has puesto como autoridad espiritual sobre mi vida. Recibo la bendición de mi Pastora Lourdes Acero y recibo la bendición de la profecía de los que ministran por la inspiración del Espíritu Santo. Te pido que mis líderes espirituales hablen bajo la inspiración de tu Espíritu Santo, palabras de bendición sobre mi vida. No permitas que mi ojo sea como el que escarnece a su padre y menosprecia la enseñanza de su madre. La fuerza y el poder están en tu mano Señor. En tu mano está el hacer grande y dar poder a todos. Tú controlas los tiempos de lo que sucede en el mundo. Tú quitas reyes y pones reyes. Das sabiduría a los sabios y ciencia a los entendidos. Obedeceré y me sujetaré a quienes me gobiernan, oraré por las autoridades establecidas por ti. Pon guarda a mi boca y no permitas que hable por mi propia cuenta sino por tu autoridad que mora en mí. En el nombre de Jesús. Amén.