Daniel 1. 6-7. Entre éstos estaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los hijos de Judá. 7 A éstos el jefe de los eunucos puso nombres: puso a Daniel, Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abed-nego.
Amoldarlos a las costumbres de Babilonia era el plan. El sistema del mundo hace lo mismo el día de hoy. ¡Quiere arrastrar a tus hijos hasta convencerlos de llamar a lo bueno malo y a lo malo bueno! Padres y madres de familia necesitan vigilar las influencias que se ejercen sobre sus hijos. Como autoridades legítimas, llévenlos a la verdad que hay en Cristo, para que no les impongan ideas erróneas, ya que los niños y los adolescentes son muy vulnerables, por falta de convicciones maduras.
Isaías 5. 20. ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
Victor, lo que pretende el mundo:
CAMBIO DE IDENTIDAD: La ideología de género provoca confusión en la
identidad, ya que interpreta la sexualidad y la afectividad humanas como un hecho puramente psicológico (de preferencia y voluntad), anulando la influencia de la naturaleza biológica sobre la conducta humana
CAMBIAR LO QUE CONSUMIMOS: La comida chatarra ha provocao la mayor pandemia de enfermedades metabólicas, como la diabetes.El consumo de pornografía. Necsitamos consumir la palabra de Diospara producir fe.
CAMBIAR LO QUE HABLAMOS: Los cambios en la forma de pensar y de creer
cambia también nuestra forma de hablar. La sociedad ya no habla de pecado y habla mucho de temor, incertudumbre, incredulidad, crítica, juicio y deshonra a Dios y al prójimo. ¡Hablemos fe, victoria, posiblidad! En Cristo siempre.
Sálvame Padre, porque se acabaron los piadosos, han desaparecido los fieles entre los hijos de los hombres. Todos hablan mentiras, con lisonja y doblez de corazón. Por mi lengua prevaleceré, mis labios son míos. Hablaré para glorificar tu nombre, para exaltarte, para darte gracias por tus bendiciones, por tus misericordias, que son nuevas para conmigo cada mañana. En el nombre de Jesús, amén.