Muchas traducciones de la Biblia definen la palabra aramea mammon como dinero. Esta definición es correcta, pero incompleta. mammon representa también un espíritu maligno que hace que la gente “adore el dinero”. Las personas engañadas por mammon, hacen del dinero un ídolo que gobierna su corazón, dejando a Dios en segundo plano.
Juan 14. 10. Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No pueden servir a Dios y a las riquezas.
Nuestra actitud hacia el dinero revela donde está nuestro corazón respecto a Dios. mammon hace que la persona confíe más en el dinero que en el Señor, codiciándolo intensamente al punto de hacer lo que sea, para obtenerlo. Su objetivo es que las intenciones de la mente, sus emociones y esfuerzos se centren en adquirir y atesorar más y más dinero. Mammon promete felicidad, pero nunca cumple, lo que sí hace es esclavizar al individuo con avaricia, codicia y temor.
1 Timoteo 6. 10. Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.
Padre, perdóname por haber puesto al dinero en un lugar que no corresponde. Incluso por haber llegado a amarlo, a codiciarlo. Ahora entiendo que, al haberlo hecho, caí en codicia y avaricia, que son formas de idolatría. Enséñame el verdadero lugar que debe ocupar en mi vida y ayúdame a prosperar a tu manera. En el nombre de Jesús, amén.