Sabemos que discipulado es crecimiento y transformación, pero también fructificación. Una iglesia viva está conformada por miembros llenos del Espíritu Santo, y donde el Espíritu Santo se mueve, genera un movimiento que impacta a la sociedad con el evangelio.

Hechos 17. 6. Pero no hallándolos, trajeron a Jasón y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá;

A veces entendemos libertad como el poder brincar, cantar y gritar en nuestras reuniones; y eso está bien, pero la libertad de la cual nos habla el Espíritu Santo es la libertad para llevar a cabo la tarea encomendada por el Señor, sin rodeos.

Hechos 1. 8. Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

Los primeros discípulos del Señor Jesús fueron investidos con poder de lo alto y comenzaron a alcanzar almas, respaldados por la vida sobrenatural, donde las salvaciones y los milagros ocurrían a diario.

Gracias Padre, por el regalo de tu precioso Espíritu Santo, mi Consolador, Maestro y Guía. Por el poder, la fuerza, amor y sabiduría con que llena mi vida, en el nombre de Jesús, amén.