1 Crónicas 17. 23. Ahora pues, Jehová, la palabra que has hablado acerca de tu siervo y de su casa, sea firme para siempre, y haz como has dicho.

Mateo 26. 42. Otra vez fue, y oró por segunda vez, diciendo: Padre mío, si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad.

OREMOS CONFIADAMENTE, CON FE Y DENUEDO.

Hebreos 4. 16. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

OREMOS CREYENDO QUE RECIBIREMOS RESPUESTA.
La fe es la certeza de lo que esperamos, la convicción de lo que no vemos. He.11.1.

Marcos 11. 24. Por tanto, les digo que todo lo que pidan orando, crean que lo recibirán, y les vendrá.

OREMOS ESTANDO EN PAZ CON DIOS Y CON EL PRÓJIMO.

Mateo 6. 12. Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos
a nuestros deudores.

Marcos 11. 25. Y cuando estén orando, perdonen, si tienen algo contra alguno, para que también su Padre que está en los cielos les perdone a ustedes sus ofensas.

1 Timoteo 2. 8. Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.

OREMOS PIDIENDO CORRECTAMENTE.
Santiago 4. 3. Piden, y no reciben, porque piden mal, para gastar en sus deleites.

OREMOS CUANDO ESTEMOS AFLIGIDOS Y CONTENTOS.

Santiago 5. 13. ¿Está alguno entre ustedes afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas.

Padre, en tu presencia hay plenitud de gozo, delicias a tu diestra para siempre. Tu palabra es tan dulce. Eres mi satisfacción, mi comida y mi bebida. En el nombre de Jesús, amén.