DEL PECADO:
• El egocentrismo: Adán y Eva se vieron a sí mismos, y se dieron cuenta de su desnudez, de sus carencias; pero continuaron en orgullo.
• Echar culpas: Adán culpó a la mujer, la mujer a la serpiente… y como Dios permitió que todo ocurriera en su jardín, la culpa fue de Él.
• Evadir responsabilidades: Las excusas nos hacen sentir bien por un rato, pero imposibilitan nuestra salida, nuestra salvación.
DE LA SALVACIÓN:
• Dejar de vernos a nosotros mismos y comenzar a ver de nuevo a Dios.
• Dejar de culpar a los demás por nuestros problemas y condiciones.
• Al reconocer nuestra responsabilidad personal, Dios nos perdona.
Señor, ayúdame a fundamentar mi vida espiritual en el ARREPENTIMIENTO Y LA FE, (en el reconocimiento de mis faltas, en cambiar mi forma de pensar y decidir llevar a cabo acciones en sentido opuesto al que me dirigía, conformando nuevos hábitos, un nuevo camino y destino, el que quieres para mí. En el nombre de ajesús, amén.
